Probablemente no hay nada más chocante que una personalidad "inflada" o quienes se vanaglorian constantemente de sus logros, cualidades y posibilidades.
Una personalidad sencilla a veces puede pasar inicialmente desapercibida, pero su fortaleza interior y su encanto es mucho más profundo y perdurable.
La personalidad sencilla es única y recia , sin adornos ni artificios , no le hace falta mostrar y poner en un escaparate sus posesiones y cualidades porque son evidentes y naturales.
La sencillez nos enseña a saber quienes somos, de donde venimos y a donde vamos.
No hay una imágen que la refleje fielmente en todas sus vertientes, está a la vez en todas partes y en ninguna. Existe, encontrarla cuesta, o puede que no hallamos desarrollado las capacidades necesarias para alcanzarla en nosotros mismo y por extención saber apreciarla en los demás.
Muchas gracias por tu comentario! he estado echándole un vistazo a tu blog y tampoco tiene desperdicio, así que te seguiré. Un beso!
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