dejando las dudas para algún luego
espinas esperando saborear el silencio
Dicen que siempre habrá un entonces
que haga girar la tuerca del desasosiego,
nube de polvo en el epi(c)entro de sueños
Entonces llega la lluvia ...de los pero(s)
como olvidar en un bolsillo lo que amas
imaginando que nada cambia...
...si~no lo hacen tus deseos
La ambigüedad seduce a las cartas
que dejó a la espera el destino de nuevo
como quien te entrega sus alas esperando...
...que tejas tu abismo en su reflejo
Como quien perdona la impuntualidad
si llegas a tiempo a su mar de inseguridad
para naufragar entre ...
... sus más tarde veremos
(/&;/)
Al reverso no hay que darle hora... Un buen poema. Me encantó. Besos.
ResponderEliminarQué hermosas tus palabras!!! Llegan muy profundo, besos
ResponderEliminarCreo que tus poemas siempre tienen un punto álgido y brillante, ese en el que de pronto sientes que has tocado techo o llegado a la cumbre, en cambio en los últimos que he leído ese momento se extiende a lo largo del poema y deseas que no termine nunca. No sé si es cosa mía y tampoco sé si entiendes lo que digo. No importa, sólo es la opinión de un viejo que te lee y le encanta hacerlo.
ResponderEliminarYo admiro a la gente que comparte su talento sin esperar nada a cambio, a los que como tú me dais tan buenos ratos desde el anonimato y la distancia.
Lo valoro y lo admiro.
Un abrazo y muchas gracias AtHeNeA
Ignacio
Respecto a este poema en concreto:
EliminarCreo que la simbología es muy recurrente el tus poemas, también los contrasentidos y dobles significados y eso hace que la complejidad de tus letras se adapte como un guante a quienes te leen.
Por ejemplo ese si ~ no en el que yo veo clara alusión al destino.
Me cuesta elegir esta vez una parte, reconociendo que brilla el conjunto. Pero creo que me quedo con:
"La ambigüedad seduce a las cartas
que dejó a la espera el destino de nuevo
como quien te entrega sus alas esperando...que tejas tu abismo en su reflejo"
Que tengas un buen martes y 13.
Volver a empezar, ese sería el deseo de muchos y que nunca se cumplirá.
ResponderEliminarUn abrazo.
Si estamos inmersos en la vacilación generando CV con métodos nada geniales que ni siquiera diversifican capacidades ni generan competencias competitivas debemos abandonar ese mar de dudas para aprovechando la bonanza y subidos a la ola y con viento en popa dar fin a la travesía atracados en el puerto fin de singladura.
ResponderEliminar¿Hemos acuñado el anverso o seguimos empeñados en contemplar el reverso?
Claro que el valor facial de la moneda está en el reverso pero quien lo valida lo está en el anverso. Valor y "validador" están pues en lados opuestos.
No nos la juguemos a cara o cruz y estémos a la hora convenida en el sitio acordado dispuestos a saborear el triunfo.
Y siendo el mejor momento ahora y no después y siendo además hoy martes y trece es un buen día para empezar, ¿nos ponemos a ello para que la derrota sea siempre el buen camino o rumbo y nunca el fracaso ?.
Desandar caminos, borra huellas es imposible .. y la mochila se carga de flecos que sin terminar asoman cuando menos se espera .. y agarras el fleco, lo retuerces, lo sobas , lo enrollas .. se camufla hasta el siguiente momento .. que será como siempre a la hora en punto.
ResponderEliminarabrazos de mar .. como ese hoy sereno
¿El eco (reVerso) es la repetición imprecisa de un sonido (anVerso) o sólo es la voz sin retintín?
ResponderEliminar¿Y el silencio del eco es el reflejo de la palabra no escuchada o de la no dicha?
Lanzadas las preguntas -sonidos- queda esperar las respuestas -ecos-.
Me quedo en modo escucha.
Un placer encontrarte y leerte compañera, un abrazo.
ResponderEliminarEs imposible olvidar lo que se ama.
ResponderEliminarBesos para ti.
Hermosas letras.
Me gustó mucho, y sentí necesidad de escucharlo, pero no con mi voz.
ResponderEliminarUn beso.
HD
Todo cambia, no hay nada que permanezca quieto, todo sigue su curso, su revés y sus por qués, todo no puede ser como antes, porque el camino de la vida es un constante caminar, llegar en punto o con impuntualidad a veces, o llegar derrotado hasta el final, pero siempre llegaremos aunque sea naufragando entre versos o entre aguas turbulentas.
ResponderEliminarUn placer leerte, mi querida Athenea.
Un beso muy grande a TU LUZ.
Cuando oigo un "pero" doy media vuelta y me voy.
ResponderEliminarBesos.
La ambigüedad va con la naturaleza humana,de pocas cosas cosas estamos seguros,por eso dudamos de casi todo.Y de ahí los "peros" y los "más tarde veremos"...somos humanos,nada más y nada menos.
EliminarAbrazos
Hola AtHeNeA... Nada es perfecto, todo puede ser, las dudas forman parte de nosotros, pero siempre hay que confiar... Nunca es tarde si la dicha es buena...
ResponderEliminarUn abrazo...
Cualquier día es bueno, para retomar, iniciar o continuar una relación
ResponderEliminarBesos.
Dicen que siempre habrá un entonces y yo espero que sea mas pronto que tarde. Un besazo.
ResponderEliminarPodemos albergarnos en la sombra de las conjunciones, adverbios, adjetivos pero también tenemos la opción de ser nada más ( y nada menos) que VERBO, conjugarlo en todos sus modos y dar vida a nuestro predicado, a nuestro anverso a la cara de la moneda.
ResponderEliminarBesets y gracias por hacer que la/mi neurona cobre vida cuando te leo, cielo.
Bueno las dudas siempre forman parte de todo y es natural, como seres humanos, que las tengamos aunque debieramos confiar un poquito más.
ResponderEliminarCuidate mucho besotesssssssssssssssssssss
El reverso de tus versos siempre está vivo y lleno de sensaciones.
ResponderEliminarGracias y saludos.
Alfonso.
Felicitarte por esa foto del mar tan majestuosa, es uno de los elementos de la naturaleza que me emociona. Además, como siempre decirte que tus poemas me llegan al corazón, algún día publicaré los míos, de momento los guardo. Un abrazo.
ResponderEliminarMe ha gustado el poema, es precioso, al igual que esa imagen de la playa.
ResponderEliminarBesos.
HAY UN INSTANTE EN LA VIDA EN QUE HAY QUE DAR LA VUELTA A TODO Y RENACER PARA SENTIR QUE SOMOS OTROS Y QUE PODEMOS VER LAS COSAS DE DISTINTAS MANERAS.
ResponderEliminarBESOS