La palabra, el gesto, el regalo, poema, sonrisa, abrazo, mimo, mirada, caricia, silencio, cómplice...comentario,
flor, mariposa.... instante...vocablo...
InstAntes...
Las SeñaLes
marcaban como destino
donde señaL[AS]es
Ahora...
Son instantes
al paso...
pasado.
Como una noria
desperezando el letargo.
Que se columpian
desde el reVerso
de lo no pronunciado.
Con sus inalcanzables lunas
cebando el hambre
al desengaño.
A los miedos
no hay que auparlos.
Y en los cruces de caminos
quien te deja
se ha abandonado.
A su suerte,
dejandote quizá...
un regalo envenenado.
Ese que para uno será siempre duda
y para el otro veneno en los labios.
eN _señales
[pies, ojos, piel, labios, manos, gestos]
que no es cuestión_solo_de regalar
instantes
sino de estar en algunos momentos
SeñalaDos.
☆☆☆
[pies, ojos, piel, labios, manos, gestos]
que no es cuestión_solo_de regalar
instantes
sino de estar en algunos momentos
SeñalaDos.
☆☆☆
Hola AtHeNeA.. Dudas siempre tendremos, y mal el que no las tenga, pero nos hemos dejar de seducir por el corazon, por las señales que nos manda la mente..
ResponderEliminarUn abrazo.
Buenas tardes, AtHeNeA:
ResponderEliminarTe leo y pienso lo mucho que me gustaría saber expresarme con la claridad que tú haces. Tu don expresivo es un regalo mayeútico para quienes te leemos.
Gracias por tus regalos, AtHeNeA.
Muy profundo el poema.
ResponderEliminarBesos.
Porque el instante ha de tejer esos momentos señalados con su hilo dorado… Ha de hilvanar camino a camino, ese destino esperado…
ResponderEliminarVersos que dicen, que sienten… que llueven, sobre esos caminos de señales sembrados, y emborronados…
Bsoss enormes, mi preciosa Athenea 💕
Desde que abrimos los ojos recibimos señales que hacen vibrar el alma.
ResponderEliminarUn abrazo en la tarde.
Hay señales inequívocas
ResponderEliminaresas que nuestra propia alma nos dicta
Tenemos en nuestro interior algo primitivo
se llama instinto; otros le llaman olfato
Y si algo nos huele mal, mejor echar a correr
si no viene luego la furia, la ira,
que en definitiva es la ceguera del alma
un besito y un abrazo Athe
que siga girando tu noria, tiene buenas vistas :-) y por suerte nos las regalas
A las dudas y sobre todo a los miedos hay que tenerle respeto, pero dentro de unos baremos y medidas, ya que de lo contrario acaban por comernos.
ResponderEliminarBesos.
Cada vez más sabia, y más, y más, y más...
ResponderEliminarBesos.
La verdad está en todos los momentos, buenos y malos, más allás de la comodidad y el simplemente estar.
ResponderEliminarUn abrazo grande.
ResponderEliminarBuen reto lo de señalar dos momentos:
1.- El tuyo.
2.- El tuyo también.
Y me permito, al igual que una licencia poética, un tercero, ese en el que, tal vez, mirando a Selene se coincide en un cruceiro o en un cancella pensando que "el silencio mata".
En las encrucijadas se ve a los cobardes que regalan instantes para su complacencia,ignorando las señales
EliminarCariños, Athenea
Beatriz M.
Athenea,viene al caso de mi entrada.Ahora entiendo.ESTAR en los momentos que otro necesita,sería lo más generoso e instintivo que el ser humano debería de tener.Pero siempre hay cerebros sin alma,corazones de piedra.
ResponderEliminarPero que esto no te quite la esperanza en el prójimo,porque hay gente muy buena en el mundo.
Besucos cielo!
Gó
Es un intenso e inquietante poema. Consigues acompañar cada palabra con la sucesión de esos instantes, como si de una lista incesante de diapositivas se tratara.
ResponderEliminarMe ha encantado. Sin duda lo mejor de cada instante es saber elegir, aunque sea a ciegas y no perdérselo.
Un abrazo inmenso.
Señales como un nuevo lenguaje que descifrar. No sólo la palabra habla o dice...
ResponderEliminarSiempre bella tu luz, mi querida Athenea.
Mil besitos preciosa.