Tantas cosas llevamos en los bolsillos, tantas veces las alas se han sentido apelmazadas por el no uso de volar... pero el aleteo siempre despierta el deseo de hacerlo. Volemos mi querida Athenea.
Hola AtHeNeA.. Los bolsillos son como ese cajón de sastre que guardamos cosas, sueños, ilusiones y decepciones. Que las mariposas se liberen y vuelen luciendo su belleza.. Un abrazo y buen verano, volveré en Septiembre..
Hasta solEdad tiene espacios que necesitan ser habitaDos. Gracias por la sombra que en silencio proyecta el escaloFrío de tu voz. Esa grieta muda que cauteriza por un momento el tActo con el que el horizonte se ha des(a)nuDado hoy.... y #siempre ...aL AlBa
También sueños, no nos olvidemos de ellos.
ResponderEliminarUn abrazo de luz.
Me encanta cómo describes las alas de las mariposas. Muy visual y exacto, además de hermoso.
ResponderEliminarUn abrazo.
Tantas cosas llevamos en los bolsillos, tantas veces las alas se han sentido apelmazadas por el no uso de volar... pero el aleteo siempre despierta el deseo de hacerlo. Volemos mi querida Athenea.
ResponderEliminarMil besitos para tus sueños ♥
Hola AtHeNeA.. Los bolsillos son como ese cajón de sastre que guardamos cosas, sueños, ilusiones y decepciones. Que las mariposas se liberen y vuelen luciendo su belleza..
ResponderEliminarUn abrazo y buen verano, volveré en Septiembre..
ResponderEliminarCuando reposa
pliega alas y se posa
la mariposa;
cuando vuela
despliega alas, aletea
y, a veces, revolotea.
Hay que sacudir esos bolsillos de todo lo innecesario.
ResponderEliminarUn beso dulce y dulce semana.
Agujas de olvido y arena de pupila en las aladas almas de las mariposas.
ResponderEliminarBss
Arena y olvido... sí, eso hay.
ResponderEliminarEs que a veces no saben que hacer con su libertad, así nos pasa también a los seres humanos. Saludos.
ResponderEliminarA veces somos la jaula de nuestros propios sueños. Un abrazo. Carlos
ResponderEliminar