"—La envidia y la comparación es mala siempre. Se ha escrito poco sobre este tema. Cuando uno se compara siempre busca el más y el menos respecto a los demás. Es una tasación personal y las personas no tienen precio, no se pueden tasar. Si a un niño de pequeño le dicen que tiene que copiar a los grandes y exitosos porque le marcarán el camino, puede caer en algo terrible que es la imitación, y eso es una forma de corrupción psicológica porque corrompe la propia identidad."
W.R.
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| Majla_art |
[ Distintas miradas
sobre
una misma tirada de cartas]
***
Y desear de~sandar pasos
y tirar millas
como quien lanza por la borda
el cofre de las reliquias
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| Majla_art |
Y robar a cada sueño
su contrapartida
como guante lobo blanco
teñido de malditas profecías
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| Majla_art |
Y des~ escribir ~tilar
las lealtades
que des~hilvanan nuestros días
***
[Y ser cerilla
en las manos de un niño
~equilibrista~
que quema sin malicia]
las lealtades
que des~hilvanan nuestros días
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| Majla_art |
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[Y ser cerilla
en las manos de un niño
~equilibrista~
que quema sin malicia]
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| Majla_art |
[Recogiendo el legado
que deja cada semilla]
que deja cada semilla]
hay querida
ResponderEliminarcuantas verdades ocultan
el arte
de tus maravillosas letras
me dejas pensando y me vuelo luego a mis pagos gracias
Yo nunca creí eso de la envidia pues yo nunca la e sentido por nadie cada uno es como tiene que ser,y no tiene que imitar a nadie, siempre cuando sucede algo o alguien habla mal de alguien dicen es por envidia, yo nunca le encuentro sentido a esas palabras.
ResponderEliminarBuena reflexión amiga, un abrazo feliz fin de semana.
La envidia es el mal de nuestros días.
ResponderEliminar¿Y de las noches?
EliminarCuanta razón tienes Athenea, las palabras adecuadas en el momento que se debe.... besos :*
ResponderEliminarDesde mi punto de vista, es curioso que W.R., sin d-escribir la envidia ni la comparación, hable sobre ellas mostrando "identidad corrompida" como si su valoración, ¿de psicólogo o de comunicólogo aventajado?, fuese universal, intangible y por encima del bien y del mal; del su-puesto bien escribir y del su-puesto mal valorar lo que hacemos los demás
ResponderEliminarYo creo que de pequeño le han puesto un mal modelo; eso no es lo malo; lo malo es que lo ha seguido sensu lato et sine die.
Gracias por tu comentario y cariño...
ResponderEliminarlo malo que yo no envidio a nada ni a nadie ...en todo y por todo me guio por mi corazón ...sin dos caras ni mentiras ...
mi abrazo y buenas noches
ResponderEliminarA ti también te gusta jugar con las palabras. Y de paso nos haces pensar a través de tus juegos.
Por suerte no sufro de emociones, sentimientos tóxicos como la envidia que hace sufrir al emisor o los celos que vuelven posesivo a quien lo siente. Cada uno llega hasta donde le de la vara, no debemos hacer comparaciones a los niños con otros. Simplemente buscar se desarrollen en lo que les gusta o necesitan. Ha sido un gusto visitarte.
ResponderEliminarSaludos Athenea.
Letras profundas y sinceras.
ResponderEliminarUn abrazo.
Caemos en esa tentación sin poderlo evitar... compararnos... versos para reflexionar, Athenea.
ResponderEliminarMil besitos, preciosa y buen fin de semana.
Las imágenes, me encantan. Son preciosas.
ResponderEliminarSer lo que somos es a lo único que deberíamos aspirar. Tal cual.
Un beso Athenea.
Cada uno tiene que ser libre de escoger su camino y como quiere vivirlo no que nadie nos lo tenga que marcar.
ResponderEliminarMe ha gustado el poema y las fotos que dejas para acompañarlo.
Besotessssssssss y ya queda menos para ir al paraiso
La envidia es cual virus que corroe al ser… Una vez más, es en la educación y formación donde se deben equilibrar esos valores de la vida que al final siempre acabarán pasando factura…
ResponderEliminarInteresante y reflexivo post, Athenea… Letras e imágenes perfectas en su fusión…
Un placer y mil Bsoss!!
Ya no me preocupa la envidia.
ResponderEliminarMe arranqué de las vidas de la mayoría de la gente que conocía.
Ya no saben nada de mí.
Mucho mejor ahora.
Besos.
Como sé que nadie me envidia pues estoy como más tranquilo, puesto que a mi tampoco me importa mucho lo que tienen o hacen los demás ;)
ResponderEliminarBesos.
Se puede reflexionar sobre muchas cosas, pero tu entrada invita a que nos relajemos y pensemos sobre ella.
ResponderEliminarSiempre se ha dicho que las comparaciones son odiosas. Cada persona es única y se tiene que aceptar así misma con sus defectos y virtudes, cierto que en ella está el descubrirlos y enmendarlos.
En cuanto a la envidia... es el envidioso el que sufre ya que, el envidiado, muchas veces ni se entera que inspira envidia.
Te dejo cariños en un fuerte abrazo.
kasioles
Dice un refrán:"si la envidia fuera tiña,cuantos tiñosos habría"El ser humano siempre tiende a envidiar los triunfos de los demás.Necesitamos formación para aceptarnos tal y como somos.Alegrarnos del bien de los demás y si podemos, imitemos todo lo bueno.
ResponderEliminarUn abrazo
Des-envidiar. Una tarea siempre por hacer y siempre beneficiosa.
ResponderEliminarGracias y saludos.
Alfonso.