palo junto a su nombre
de dibujo en el mandilón.
Esa que se quedaba imaginando
para llevar el amanecer
junto de tela porción.
Soy cada renuncia
que elegí matar
para hacer _lo
corazón
dictó.
Pintando el óxido
de cada coraza
y poniendo letra
al sinSabor
Soy ojo
atento
-a tientas-
vestido
en desnudez
Hoy
Soy cada renuncia
que elegí matar
para hacer _lo
corazón
dictó.
Pintando el óxido
de cada coraza
y poniendo letra
al sinSabor
Soy ojo
atento
-a tientas-
vestido
en desnudez
Hoy
He aquí...Mi confesor_ |
Sigues siendo...la tela es infinita para pintas los aafectos y querencias de un corazón grande. Un abrazo. carlos
ResponderEliminaruuufff !! "Soy cada renuncia que al corazón mató" y eres cada entrega que tu corazón dio fantástico , me encantó , un abrazo desde mi brillo del mar
ResponderEliminarSeguro que sigues siendo esa "niña"...
ResponderEliminarUn abrazo.
ResponderEliminarEs que cuando el día quiebra la noche y la luz deja ver es posible que la fantasía soñada ya se haya hecho realidad y no se confiese ni bajo tormento de mancuerda ni se renuncie a su tatuaje en el corazón y, claro, todo ello de por vida.
Tu confesor es un verdadero instrumento para hacer estos poemas que llegan a alma.
ResponderEliminarLas desnudeces nos ayudan a limpiar-nos y eso suena bien.
Besucos poeta
Gó
Hola AtHeNeA.. Eres la poeta de los espacios, ojo no del espacio, de los espacios entre estrofas, en ocasiones te he comentado que aveces tengo que leerte y releerse dos o tres veces, ahora experimento con tus espacios y es que interpretar los espacios entre lo que has escrito y lo próximo que escribes sirve para pensar..
ResponderEliminarTus poemas no se pueden leer en diagonal, hay que leerlos como un postre afrodisíaco, leyendo y relamiendo cada palabra..
Un abrazo..
De cualquiera de las maneras sigues siendo. En este Sur haceSol ese que los dos conocemos. Bicos
ResponderEliminarNuestra pluma siempre es testigo y confieso... De la niña, de la mujer... Del dictado de nuestro corazón.
ResponderEliminarUn lujo leerte, querida Athenea.
Mil besitos.
Eres la reina de las palabras bonitas que sirven del bálsamo para el alma
ResponderEliminar¡Besos mil!
Eres alguien con talento también :)
ResponderEliminarTu vocabulario es tan extenso y lo usas también, que es una gozada cada entrada que nos regalas.
ResponderEliminarBesos.
Y somos los pasos certeros y frustrados, somos armadura que se despojó, la palabra que dictaminó el corazón…somos cada renglón sembrado, niños aún, desnudos…ante aquel que escucha nuestra más íntima voz, y la dibuja…
ResponderEliminarPrecioso e inspirador, mi querida Athenea… Tienes un don maravilloso para llevarnos de la mano de tus versos, de tu luz…a ese lugar donde somos, y sentimos…
Bsoss y cariños enormes ♥
De niña debías ser tremenda, jajajaj, que nadie borre lo poco que queda en nosotros de cuándo éramos niños!, un abrazo.
ResponderEliminarUna confesión extraordinaria que sabe decir(se) como la niña que eres. Espléndido.
ResponderEliminarGracias y saludos.
Eres el poema que late, camina y respira.
ResponderEliminarBesos.
Precioso, Athenea.
ResponderEliminarUn beso.