Has conocido
la columna vertebral
del mismísimo infierno.
RecovEco suntuoso
que no se viste de hielo ni fuEgo.
La maldad está adorMecida
sobre la verdad de quien
te deja pasar en la cola o el metro.
Su billete es la falsa modestia
de aparentar lo que en verdad
simulan sus muecas y reCelos.
Lo has visto, pero no lo has hecho...
no has astillado los prejuicios
para sepultar lo trágico
que viste cada aparEnte acierto.
Hay como una tristeza velada en estos versos...
ResponderEliminarUn abrazo en la noche.
La maldad siempre se agazapa entre velos de bondad, esperando a salir, solo necesita un estímulo para hacerlo.
ResponderEliminarAbrazo inmenso a tres bandas.
Para poder distinguir hay que conocer todas las espinas vertebrales y apreciar los indicios del falso billete.
ResponderEliminarUn placer leerte, mi querida Athenea.
Mil besitos para ti en este primero de mayo ♥
He vuelto.
ResponderEliminarRimo siempre como me de la gana.
Eso sí, con la cara lavada.
Sé desde siempre de faros y nostalgia.
No renuncio nunca a lo más valioso...
Mi Alma.
Sed felices en este 1/5 peculiar quince.
Me alegra verte aquí...AbRaZoS PaRa TI.
ResponderEliminarCreo que mi comentario se resumiria a lo ultimo que has escrito. " El alma". El recelo el rencor, la envidia siempre estarán al costado de cualquier camino al acecho. Lo importante es saber no esquivarlo sino saber que son parte del mundo. No de nosotros. Un abrazo
ResponderEliminarHay maldades que son un clamor mendigando atención… Mejor no atenderlas…
ResponderEliminarBsoss y abrazos enormes, mi querida Athenea 😘
Hola AtHeNeA.. Que bien has definido esa maldad, esa falsedad hipócrita como un recoveco sinuoso y maléfico..
ResponderEliminarUn abrazo..
La maldad está en todas partes.
ResponderEliminarDa miedo vivir.
Besos.
Rimas como te da la gana pero siempre lo haces muy bien, la maldad humana se reviste con mayor frecuencia. Besos preciosa.
ResponderEliminarla maldaz vive en cada uno de nosotros.. Sabremos distinguirla
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ResponderEliminarQue no, que no somos tan caballeros como nos imaginais, que lo de dejaros pasar delante es por otras cosas. No os lo creáis nunca ni aún cuando lleguéis a esa etapa de la vida que se dice ancianidad que seguro que pensaremos en vuestras hijas e incluso en vuestras nietas. Y que conste que no es maldad ni la memoria de reptil, sencillamente que es bonito y ley de vida.
Cxxxxtura hasta la sepultura y de ello da fe el cementerio ya que está lleno de ellxs y de sus maldades aviesas y aún espera a algunx más.