El bosquejo de su piel
late impermeable
entre todas las renuncias
que tropiezan con el caMinante.
... y pasan tan indemnes
como ingentes,
impertinentes,
eternas...
rogando tinta
entre las líneas que se quiebran,
como el carboncillo
que reCita a las aceras.
Como el poeta que no se que(d/j)a.
Pero ....es....que...
su aDios clama entre asfalto
y las reminiscencias de cada pRoEZA.
Hola AtHeNeA.. Ese caminante que hace poema del camino recorrido..
ResponderEliminarUn abrazo..
Versos que laten en el alma...
ResponderEliminarUn abrazo.
La piel cuenta la historia de lo que se va dejando, pero cada poro exuda esos pequeños logros que vamos consiguiendo.
ResponderEliminarAbrazo inmenso de noche.
Leer y disfrutar, tal vez también leer y envidiar.
ResponderEliminarQue guapo Athenea, me encanta. Un besin mi querida amiga.
ResponderEliminarEl poeta que no se queda es el mejor.
ResponderEliminarBesos.
ResponderEliminarBajo un cielo pleno de celajes, a veces, me siento inmerso en una maraña de palabras sin éxito, sin sentimientos e incluso rodeado de situaciones a cuyo desenlace no soy capaz de ponerle orden con sentido ni oración rogatoria y mucho menos poesía.
Probablemente por ello, descalzo y a modo de último lance ganador de partida, sigo camino buscando la hazaña de llegar sin renunciar a las creencias en que me educaron.